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La compraventa de viviendas registra su mejor octubre en 11 años tras dispararse un 15,8%
El año 2018 es, a nivel inmobiliario, el año de la consolidación de la recuperación en el mercado. La tendencia al alza ha sido constante en todos los indicadores, especialmente en los más relevantes: el volumen de operaciones y los precios. Respecto al primero, las cifras del INE publicadas ayer constatan un aumento del 15,8% en la compraventa de viviendas en octubre, hasta 43.536 operaciones, la cifra más elevada para un mes de octubre desde 2007.
En cuanto al segundo -los precios- crecieron un 7,2% en el tercer trimestre del año en comparación con el mismo periodo de 2017. Los expertos coinciden en que las subidas se mantendrán en 2019 -aunque en niveles más bajos- y advierten de que ese encarecimiento podría alentar la especulación de los propietarios en las grandes capitales.
La rentabilidad que arroja la inversión residencial ha reavivado el interés de los propietarios por este tipo de activos y desde Pisos.com aseguran que ese comportamiento especulativo es uno de los riesgos que afronta el sector en 2019. "Los particulares pueden dejarse llevar por la euforia alcista de los precios y establecer valoraciones por encima del mercado", explica Ferran Font, director de Estudios de Pisos.com a EL MUNDO. Se trata de un "riesgo potencial" que identifican principalmente en propietarios particulares y no tanto en grandes tenedores, ya que "éstos últimos suelen poner sus activos en el mercado a precios más ajustados".
El riesgo es mayor en las ciudades como Madrid o Barcelona, donde el precio de compraventa de la vivienda ha experimentado crecimientos de doble dígito. La principal consecuencia de esos comportamientos especulativos recaería sobre la demanda, que se trasladará a otras zonas con condiciones más accesibles. "Si los compradores no pueden comprar, bien porque no quieren pagar tanto o bien porque no pueden pagar tanto, se irán a otros puntos de la ciudad que ofrezcan mejores condiciones", apunta Font.
Este cambio empieza a observarse de forma incipiente en el centro de la Ciudad Condal, donde se percibe ya una ralentización en la subida de los precios y un movimiento de los compradores hacia los barrios de la periferia y otras ciudades limítrofes. "Esta tendencia podría extrapolarse pronto a Madrid, porque también en la capital se han tocado máximos", apuntan desde Pisos.com.
Además, el comportamiento especulativo puede introducir un foco de distorsión en el mercado y limitar el acceso a la vivienda de los ciudadanos. "El precio de la vivienda crece a un ritmo muy superior al de los salarios y los españoles no han recuperado el poder adquisitivo que perdieron con la crisis", afirma Beatriz Toribio, directora de Estudios y Asuntos Públicos de Fotocasa.
"Aunque los precios aún siguen a niveles de 2012, no podemos olvidar que el grueso de la población no puede acceder al mercado de la compra porque su situación económica se lo impide", añade.
Fuente y foto; elmundo.es/economia/vivienda